lycans and vampires

Los insectos han comenzado con su concierto nocturno, estoy acostumbrada a escucharlos cubriendo el ambiente con sus sonidos únicos. A veces la melancolía de esa música que mi cerebro forma con ellos me recuerda lo imposible de mi vida y las barreras que aunque mil veces intente derrumbar serán levantadas de nuevo, piedra por piedra. Todos los días son iguales para mí, no veo diferencia entre uno y otro solo la caída del tiempo sobre mi sin que influya jamás en mi rostro.


-en que piensas-una voz hizo que me sobresaltara.


-en nada- mire a la sombra acercarse lentamente hacia mí caminando inseguro.


-estas sola-su instinto no podía bajar la guardia.


-me pides huir y aun desconfías de mi- pregunte apaciblemente.


-en ti confió, pero en tu familia no-gire mi cabeza pensando en la barrera principal.


Me abrazo por la espalda con su cabeza descansando en mi hombro, trataba de darme confianza pero me era tan difícil pensar en lo que me esperaba de ahí en adelante.


-nadie en tu familia sospecha- pregunte tratando de olvidar mis dudas.


-nadie, aunque micky ha estado preguntando acerca de las mezclas y sus consecuencia pero creo que es mas curiosidad- sus ojos se dirigían al estrellado cielo azul que se extendía esa noche, la luna estaba presente pero solo una parte de ella, no la suficiente como para lograr hipnotizarlo.


-macarena también ha estado extraña últimamente- acote –pero tampoco creo que sospeche algo- aunque el silencio entre una frase y otra durase apenas segundos era tortuoso.


-cuando lo haremos- pregunto con miedo en sus palabras.


-estas tan asustado como yo- no pude evitar decirlo.


-si- respondió llanamente – pero quiero ser feliz contigo-termino.


Una brisa soplo haciendo que la tela de mi vestido volara mientras él se aferra con fuerza a mí; siento el calor de su cuerpo llenando el mío.


-la ceremonia de lula será en tres días, no podrán hacerlo si no estoy presente- dije-al día siguiente será la fiesta oficial, ahí escaparemos-no sabía de dónde sacaba la fuerza para pronunciar las palabras que salían de mi boca.


Yunho no respondió, me giro para que pudiera verlo levanto suavemente mi quijada y me beso, la explosión que se producía al contacto fue lo que hizo que desde un principio se convirtiera en el hombre que amo, con nadie pude sentir jamás lo que siento cuando sus labios tocan los míos y su lengua se juega en mi boca.


El viento giro a nuestro alrededor encerrándonos en un torbellino, alejándonos del lugar donde estábamos, no sabía a dónde iba pero sabía que estaba con él.


En menos de un minuto nos encontrábamos sobre una enorme montaña cubierta de nieve, la niebla no permitía ver la altura real a la que me encontraba, pero estaba sobre las nubes.


-seria tan fácil si pudiéramos escapar tan fácilmente- las palabras brotaban con tristeza.


-pero no sería divertido- yunho intentaba subirme el ánimo, esboce una sonrisa y volví a mirar la blancura del paisaje.


-si no fuera por ese rastro- dentro de mi siempre quise ser una persona normal.


-somos distintos a los humanos-dijo el- podemos hacer cosas que ellos no- su mirada era lejana- pero cuando lo hacemos dejamos el rastro-lo mire de soslayo.


-sabes q nunca envejeceré… verdad- la melancolía estaba empezando a poseerme.


-sabes que cada luna llena llenare la casa de pelo- no pude evitar reír ante sus comentario – tu y yo somos diferentes, pero no me importa mientras pueda estar cerca un segundo más, cualquier precio será poco- una lagrima rodo por mi mejilla hasta el final de mi rostro.


-te amo- ahora yo lo abrace con todas mis fuerzas deseando que nunca me separan de él.


-Maite-la voz sombría apareció en mi cabeza.


-alguien ira a mi habitación- Dije con premura.


Tomo mis manos y de nuevo el torbellino nos encerró transportándonos a las cuatro paredes que me recordaban mi linaje por doquier.


-adiós- dijo dándome un beso muy cerca de mi oreja, desaprecio en una ráfaga de aire.


-Maite- Leslie entro gritando a la habitación.


-que sucede- trate de parecer lo más normal posible.


-lula no quiere que taemin se quede en casa hasta el baile- la rebeldía de mi pequeña hermana era desastrosa, lula sufría mucho por ella.


-no te servirá de nada- pude escuchar la voz de mi hermana cuando entraba a mi habitación.


-déjanos solas-dije a Leslie sacándola de ahí.


-no lograras convencerme-pudo prever mis intenciones.


-no lo hare- respondí-para que hacerlo si se que ella ganara-concluí.


-siempre están todos de su parte- note molestia en sus palabras.


-en tres días tendrás cosas más importantes de que preocuparte-intente cambiar el tema.


-mi cumpleaños no es problema- dijo segura.


-este lo será, pude cambiar tu vida- acote.


-tal vez-salió de la habitación impidiendo que tratase de prepararla para lo que vendría, suspire pensando como lo tomaría y si era ella realmente.


-de verdad crees que puede ser ella- pregunte al chico que regreso a mi habitación.


-investigue todo lo q pude, hay muchas cosas que concuerdan- ahora su voz era segura.


-nuestra huida depende de si lo es-acote.


-el despertara cuando ella lo haga-pregunte indecisa.


-si, pero no sé si eso será bueno o no-porque no podía estar segura de mi futuro y lo que iba a hacer, si nos equivocábamos y éramos atrapados nos matarían al instante.


-tengo miedo-murmure- mi prometido es poderoso- me senté en la cama con la cabeza baja.


-yo también lo soy-se sentó junto a mi –te protegeré con mi vida- puso mi cabeza junto a su pecho donde escuchaba los suaves latido de su corazón.


-no quiero que tu corazón deje de latir-mi mano acaricio su rostro.


-no lo hará mientras tu estés feliz- el ambiente poco a poco se había convertido en melancolía mezclada con drama, sentía como las lagrimas se agolpaban en mis ojos intentando salir.


-te amo- ahora fue él quien lo dijo.


-quédate conmigo-rogué débilmente-al menos hasta que me duerma-lo mire rogando.


Me acostó sobre la cama acariciándome y cantando una canción que solo yo escucharía, se recostó a mi lado brindándome calor, mis parpados cayeron deseando dormir cada noche así con él junto a mí.


-Maite-la voz regreso, me levante buscando a yunho pero el ya se había ido, la cama seguía caliente.